Indicó la nieta del líder independentista Pedro Albizu Campos y delegada en el exterior del Partido Nacionalista boricua que el momento actual es como si fuera "una segunda intervención de Puerto Rico".

Durante el diálogo con los reporteros en la sede de la Misión de Puerto Rico en La Habana, Meneses y su colega estadounidense Linda Backiel, radicada en esa isla, comentaron que el país "es otro después de María".

"Jamás se habían visto tanquetas en las calles y todo este despliegue militar para qué si no están resolviendo nada", reiteró la representante del Partido Nacionalista tras considerar que María abrió una oportunidad a Estados Unidos para tratar de 'apoderarse por completo de lo que pudiera quedar del control del territorio puertorriqueño'.

En este contexto, resulta nula la respuesta de las autoridades norteamericanas en lo concerniente a ayuda, según las dos abogadas, quienes calificaron de "bofetada para los puertorriqueños" la visita de cinco horas a la isla del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dos semanas después del paso del meteoro.

Las testimoniantes indicaron que existe un estado de paralisis en la isla conocida como "del encanto" luego de casi 20 días de los embates del huracán.

Municipios sin comunicación, refugios sin alimentos ni agua, crisis de la industria avícola, destrucción de los cultivos y las infraestructuras, miles de árboles derribados, ausencia de servicio eléctrico en casi el 90 por ciento de la isla, es la imagen actual de ese territorio caribeño.

Con categoría 5 en la escala Saffir-Simpson y vientos superiores a los 240 kilómetros por hora, María golpeó a Puerto Rico el 20 de septiembre último y provocó 39 muerto.

De colonia de España, Puerto Rico pasó al control de Estados Unidos tras ser invadido en 1898 por las tropas de esa nación anglosajona, y desde 1952 Washington la mantiene con estatus de Estado Libre Asociado, aunque el comité de descolonización de Naciones Unidas denuncia este caso como colonial.

Pese a la existencia de una fuerza anexionista que infructuosamente trata de que Washington acepte a la isla como una estrella más de la bandera de Estados Unidos, el movimiento independentista cuenta con el respaldo de importantes sectores de la sociedad puertorriqueña.Sputnik

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