La publicación sostiene que Belgrado "vuelve locos a los ciudadanos de Croacia y Bosnia y Herzegovina, manipulándolos para que salgan del país, además de causar la depresión universal y estimular el odio y la intolerancia".

El autor `revela` que las ondas que Serbia usa para "influir" en las decisiones de la Corte constitucional están basadas en la tecnología de clonación de electroencefalograma para controlar la mente.
Tibold está seguro de que de esta manera Serbia busca provocar brotes de epidemias letales y el éxodo de varios territorios para "desocuparlos de la población no serbia".

Además, según insiste `el experto`, Serbia se prepara para crear un escudo impenetrable capaz de resistir a cualquier tipo de armas nucleares y biológicas al usar los planos del famoso físico e inventor, Nikola Tesla.

Comentando estas `ideas innovadoras` para Sputnik, el presidente del Movimiento ecológico serbio, Nikola Aleksic, confirmó la existencia de las teorías conspirativas sobre una antena del proyecto HAARP estadounidense que supuestamente funciona en el territorio serbio.

Científicos croatas denuncian que el HAARP serbio nos vuelve locos
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Científicos croatas: "el HAARP serbio nos vuelve locos"
Sin embargo, no existe ningún modo de dirigirlo contra el Estado vecino e influir sobre las psiques de los ciudadanos de Croacia.
Al mismo tiempo, Aleksic manifestó que el HAARP podría tener una influencia negativa sobre la psique y además llamó la atención sobre que "los cambios climáticos ya no se producen de forma natural".

"Hay indicios de que se puede manipular el clima con ciertas herramientas", argumentó.

La Comunidad académica croata en la diáspora fue creada en 1978 por el farmacéutico Dragan Hazler, que vive desde hace años en Suiza.

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