"No estamos cerrando oficinas comerciales, sino que buscamos encarar el uso de propiedades; esta medida se tomó debido a la disparidad en la posesión de bienes inmuebles entre nuestras dos misiones diplomáticas; no hemos cancelado el trabajo de los representantes comerciales rusos, ellos simplemente no podrán hacer uso de esos [edificios] anexos", aclaró la fuente.
El Departamento de Estado exigió el 31 de agosto a Rusia cerrar su consulado general en la ciudad de San Francisco (oeste) y otros dos anexos en Nueva York y Washington con fecha límite del 2 de septiembre.
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