La joven dijo, según publica el Daily Mail, que no dejaría que el terrorismo la impidiese ver el mundo y meses después, viajó a Cataluña, donde un atropello masivo en Las Ramblas de Barcelona y otro atentado en Cambrils (Tarragona) ha causado ya la muerte a 14 personas y más de un centenar de heridos.
En esta ocasión, estaba con sus amigas en una tienda de la Plaza de Barcelona. Allí las puertas se cerraron con llave cuando todo comenzó. “En una fracción de segundo todo cambió y todo el mundo comenzó a correr y a entrar en pánico, corrían por sus vidas, lloraban y gritaban”, cuenta.
Mientras, ella y las otras personas que se encontraban en el interior del establecimiento se alejaron de las ventanas y se estuvieron en el suelo hasta que la situación se estabilizó.
A pesar de haber sido testigo de tres atentados en el mismo año, Julia Monaco reconoce no estar asustada. “Solo tienes que seguir adelante”, expresa.Noticias Cuatro
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