A las 22.00 (20.00 GMT) de la noche pasada en Hamburgo comenzaron las protestas no autorizadas contra la próxima cumbre del Grupo de los Veinte, prevista para los días 7 y 8 de julio.

Los manifestantes intentaron marchar hacia el centro de la ciudad, coreando consignas antigubernamentales y arrojando botellas, cuando fueron interceptados por la policía.

Los agentes emplearon cañones de agua y gas pimienta para tranquilizar a los manifestantes e impidieron la instalación ilegal de 12 tiendas en el parque de Emil Wendt.
"A causa de las concentraciones de ayer, algunas de las cuales continuaron hasta altas horas de la noche, cinco personas fueron detenidas en total", dice el informe de la policía.

Se agrega que a todos los detenidos les dejaron ir después de la identificación.

Además, "cuatro policías y una peatona sufrieron lesiones durante una manifestación", afirma el documento, al precisar que se trata de heridas leves.

Salieron a las calles de Hamburgo para protestar contra la política de los países miembros del G20 y exigir una globalización más justa y unos estándares ecológicos más altos, así como para expresarse en contra de la creación de la zona de libre comercio con EEUU y Canadá.
Durante la próxima cumbre del G20, cerca de 20.000 policías supervisarán la seguridad en la ciudad con cañones de agua, helicópteros, un avión, perros y caballos entrenados a su disposición.

El ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maizière, declaró con anterioridad que la policía estima en unas 8.000 las personas "dispuestas a cometer actos de violencia" durante la celebración de la cumbre.

Etiquetas: