En total, 200 de los acusados se encuentran bajo arresto, nueve están comprometidos a no salir del país y 12 están evadidos de las autoridades, incluido el imán opositor Fethullah Gulen, acusado por Ankara de haber orquestado el motín.
Los individuos son acusados de "un intento de suprimir por fuerza el Parlamento de Turquía, derrocar el Gobierno turco y asesinar al presidente, matar a 250 y herir a 2.735 ciudadanos, dirigir o ser miembros de una agrupación terrorista, limitar la libertad de los funcionarios", informa el medio.
Los acusados podrían enfrentar cadena perpetua o ser encarcelados por un periodo largo.
La primera etapa del juicio durará hasta el 16 de junio.
El estado de excepción, anunciado unos días después del fallido golpe de la noche del 15 de julio de 2016, no se levantará hasta que se logre la estabilidad y la seguridad en el país, según declararon las autoridades.
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