La cervecería Norrebro Bryghus de Copenhague llevó 50.000 litros de orina tomados del Festival de Música de Roskilde, una ciudad cercana a la capital de Dinamarca. Este volumen de líquido será reciclado en la cerveza Pisner, un juego de palabras entre 'pis' y 'Pilsner', una variedad de esta bebida.
¡No te asustes al mirar tu vaso de cerveza! El líquido de la orina no será el ingrediente principal del beberaje, sino que se utilizará como abono fertilizante en los campos de cebada.
"Cuando aparecieron las noticias de que empezamos a fabricar 'Pisner', un montón de personas pensaron que estábamos filtrando la orina para utilizarla directamente en la cerveza, lo que nos causó mucha gracia", dijo a la agencia Reuters Henrik Vang, director ejecutivo de Norrebro Bryghus.
El proyecto fue impulsado por el Consejo de Agricultura y Alimentos de Dinamarca, que recolectó el desecho orgánico en 2015. De toda esa orina, en la cosecha de 2016 se obtuvieron 11 toneladas de cebada.
Este proceso de 'cerveciclaje' ('beercycling') busca crear un círculo completo en el consumo de cerveza, que comienza con la cosecha y termina con la orina. Las 11 toneladas de cebada rindieron para producir 60.000 botellas de Pisner.
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