Rusia en la actualidad lleva a cabo una operación militar fuera de los límites de la URSS, por primera vez desde la disolución del país comunista, y puede que sus acciones contra grupos terroristas como Daesh —autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países— hayan provocado el deseo de venganza de los yihadistas, opinó el politólogo Kerim Has.
Recordó que los radicales están acorralados en la capital de Daesh, Al Raqa, por lo cual están dispuestos a hacer todo para impedir cualquier cooperación entre Rusia, EEUU y kurdos sirios en la ofensiva contra la ciudad.

Otro posible responsable del atentado son los grupos yihadistas que actúan en la provincia de Idlib, donde Rusia recientemente intensificó sus bombardeos contra los terroristas. Sin embargo, recalcó Has, una vez que una de estas agrupaciones radicales se declare responsable del ataque en la ciudad rusa, Rusia intensificará los ataques contra esos grupos en Idlib.

El experto señaló que el número de ataques contra Rusia se disparó recientemente. Solo un día después del atentado en San Petersburgo, en otra ciudad rusa, Astracán —en el sur de la parte europea del país eslavo-, dos policías fueron asesinados por radicales. Según Has, todo esto solo hará que Rusia amplíe sus acciones en Siria.

A juicio del entrevistado cabe recordar que existen varios países que utilizan organizaciones terroristas y grupos opositores para sus intereses así que el reciente atentado puede representar un intento de obstaculizar los esfuerzos diplomáticos de Rusia en Siria.
No obstante, la operación rusa a gran escala en Idlib contra los terroristas puede causar una reacción negativa de Turquía y de ahí una amenaza a la cooperación con Ankara.

En caso de que se confirme la responsabilidad de uno de los grupos opositores sirios en el atentado en Rusia, Ankara tendrá que rechazar el apoyo a estos grupos así como dejar de usar estas agrupaciones en operaciones militares. Esto por su parte puede ayudar a fortalecer la cooperación entre Turquía y Rusia en Siria.

Otro experto turco, Mete Yarar, señaló que es crucial encontrar los verdaderos motivos y causas de este ataque.

"Cabe subrayar que cuando se produjo el atentado Vladímir Putin estaba en San Petersburgo donde mantenía una reunión con el presidente de Bielorrusia, en el marco de la cual os dirigentes discutieron varias cuestiones, entre ellas la situación en Ucrania. En este sentido se puede decir que el atentado tiene el carácter de un "mensaje a las autoridades rusas".

Según Yarar, "los atentados de la época actual forman parte de una 'guerra subsidiaria'" así que "no se puede considerar que este ataque fue un atentado realizado solamente por un grupo terrorista".
Aclaró que en la actualidad estos grupos son usados por ciertos estados como una herramienta para atacar a otros países.

"Creo que este atentado es parte de la guerra de 'cuarta generación' y está conectado con la tirantez con los países europeos y la situación que rodea la crisis ucraniana", pronunció.

De acuerdo con Yarar, la guerra de 'cuarta generación' es un proceso que consta de varios elementos, como provocaciones terroristas, embargos económicos y actos de presión psicológica. Por tanto hay que interpretar este ataque terrorista en el contexto de una cadena larga de eventos de le preceden y que le seguirán, concluyó.

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