Friedman pronunció un pequeño discurso en su primera aparición pública desde que el Senado lo confirmó en una votación muy dividida entre el Partido Republicano y el Demócrata.
El nuevo embajador ha recibido muchas críticas porque mantiene estrechas relaciones con colonos judíos en territorio palestino ocupado y por haber hecho declaraciones polémicas respecto al conflicto.
Al jurar su cargo, Friedman agradeció al presidente de EEUU, Donald Trump, "su liderazgo y amistad" y que lo hubiera escogido para desempeñar el cargo diplomático.
Friedman añadió que hará todo lo que pueda para "justificar la fe (de Trump) en mi" y que espera "promover la paz y la estabilidad" en Oriente Medio.
Friedman, un abogado judío religioso que fue el principal enviado de Trump a la comunidad judía durante la campaña electoral de las elecciones presidenciales de EEUU, está considerado como próximo a la extrema derecha en el panorama político israelí.
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