"Creo que esta Copa Confederaciones, así como el mismo Mundial, ayudará todavía más a los rusos a entender la importancia del fútbol, lo que realmente representa", resaltó el exjugador.
Roberto Carlos se encuentra en Portugal acompañando el trofeo de la Copa Confederaciones, que está de gira por los países que pelearán por él del 17 de junio al 2 de julio en Rusia.
El brasileño, que jugó durante un año en el club ruso FC Anzhi Majachkalá, equipo del que también fue entrenador interino, resaltó la pasión por este deporte entre los rusos, "adoran el fútbol, les encanta".
Sobre lo que podrán apreciar los que visiten el país para disfrutar del certamen, resaltó el calor de la época y la alegría de los rusos.
"Hay que tener en cuenta que los rusos sufren mucho el invierno, por lo que aprovechan el calor al máximo. Quienes viajen a Rusia se encontrarán con algo muy bonito: gente muy predispuesta, bares llenos. Ya verán qué buen ambiente".
Ya más enfocado en la competición que enfrentará a los campeones de las seis confederaciones que integran la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), el ex lateral izquierdo destacó las posibilidades de Rusia que competirá en el grupo A junto a Nueva Zelanda, Portugal y México.
"Es un grupo difícil, muy complicado. Pero el hecho de jugar en casa y con el público a favor, pondrá las cosas difíciles sus rivales. La pelea estará entre Rusia, Portugal y México", acotó.
Al ser cuestionado sobre sus favoritos al título se declinó por Portugal, México y Alemania.
"Son los tres equipos que disfruto viendo jugar y tienen muy buenas individualidades", agregó.
La llave B del certamen la integran Alemania, Chile, Australia y Camerún.
Rusia acogerá por primera vez en su historia la Copa Confederaciones del 17 de junio al 2 de julio de 2017, con partidos en Moscú, San Petersburgo, Kazán y Sochi.
Mientras que en 2018 el país albergará su primer Mundial de Fútbol entre el 14 de junio y el 15 de julio con encuentros en Moscú, San Petersburgo, Kazán, Kaliningrado, Volgogrado, Nizhni Nóvgorod, Samara, Saransk, Rostov del Don, Ekaterimburgo y Sochi.
Desde que en 2010 Rusia recibió la autorización para organizar el Mundial los medios occidentales comenzaron una campaña con tal de desprestigiar la organización del torneo.
Varios medios de prensa atacaron al país sede como lo demuestra el artículo del diario británico The Guardian publicado a mediados de febrero, en el cual se afirma que "los 'hooligans' rusos prometen a los aficionados ingleses 'un festival de violencia' durante el Mundial del 2018".
Este texto hace referencia al altercado entre hinchas de ambos países durante la Eurocopa de Francia en 2016, lo que provocó un escándalo internacional y la expulsión de varios rusos del país galo.
En tanto el canal televisivo BBC transmitió en febrero el documental denominado 'El ejército de hinchas violentos de Rusia', que se enfoca en los fanáticos rusos que supuestamente se preparan para el encuentro con los aficionados británicos en el Mundial de fútbol 2018.
El vicepresidente del Comité de Deportes de la Duma Rusa, Valeri Gazaev, afirmó que la película transmitida por el canal de televisión británico era una provocación a los aficionados rusos.
Sobre este tema también se pronunció el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, quien a mediados de febrero afirmó que no teme problemas con hinchas violentos en la Copa Mundial de Fútbol.
"No estoy preocupado por el 2018, tengo plena confianza en las autoridades rusas", dijo Infantino al margen de una reunión en Doha, Catar.
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