Noruega concedió asilo político a cuatro oficiales turcos y a un agregado militar, acusados por Turquía de participar en el intento fallido de golpe de Estado que tuvo lugar en julio del año pasado.
"Es inaceptable y representa el apoyo y la defensa del grupo criminal conocido como FETO, no lo podemos admitir", dijo el titular turco.
Los cinco ciudadanos turcos niegan las acusaciones de Kurtulmus, quien asegura que los mismos eran miembros de la organización del imán Fethullah Gulen, residente en EEUU, a quien las autoridades turcas atribuyen el rol principal en el intento golpista.
"La entrega inmediata de esos criminales, que buscan refugio en los países europeos, es una condición indispensable para seguir manteniendo relaciones amistosas entre Turquía y esos Estados", advirtió el vice primer ministro turco.
El fallido golpe militar que tuvo lugar el 15 de julio de 2016 se saldó con más de 240 muertos y unos 2.200 heridos.
Después de la revuelta las autoridades turcas iniciaron una campaña de purgas en la que fueron detenidos o suspendidos decenas de miles de militares, agentes, jueces, funcionarios públicos y docentes.
Ankara llama a los partidarios de Gulen "organización terrorista de Fethullah" (FETO) o "Estado paralelo"
El teólogo, cuya extradición Ankara exige a Washington, rechaza su implicación en el golpe y llama a establecer una comisión internacional para investigar el suceso.Sputnik
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