Los yemeníes congregados el viernes frente al Ayuntamiento de la costera ciudad de San Francisco, en el estado de California (oeste), reclamaron la retirada de una ley que, según defensores de los Derechos Humanos, es una orden ejecutiva que viola la protección constitucional de libertad de credo y está “diseñada para discriminar a los musulmanes”.

“El mismo Profeta Mohamad (la paz sea con él) era un inmigrante”, dijo el doctor Hatem Bazian, un imán local, antes de que diera comienzo el rezo de los viernes que, en esta ocasión, los files musulmanes yemeníes iban a celebrar frente al citado Ayuntamiento, un evento organizado como parte de su protesta.

Mi padre y otros miembros de mi familia todavía están en Yemen y ahora no puedo traerlos aquí conmigo”, afirmó Ali Said, ciudadano estadounidense nacido en Yemen, en la protesta contra nueva ley migratoria del presidente de EE.UU., Donald Trump.

A juicio de Bazian, si el Profeta (P) hubiera vivido en estos tiempos, no habría podido viajar a EE.UU. por las políticas islamófobas que impulsa el presidente estadounidense, Donald Trump.

A esta misma protesta, bautizada “Prohibición musulmana 2.0”, se sumaron varios activistas estadounidenses que, al igual que los yemeníes, pidieron el fin de la referida orden ejecutiva que prohíbe la entrada a suelo estadounidense a los nacionales de seis países de mayoría musulmana, entre ellos Yemen.

“Mi padre y otros miembros de mi familia todavía están en Yemen y ahora no puedo traerlos aquí conmigo”, afirmó Ali Said, ciudadano estadounidense nacido en Yemen, después de la oración.

Said también comentó que después de 17 años viviendo en EE.UU., debido a la nueva ley, no puede traer a su anciano padre, que necesita de sus cuidados, para después agregar que tiene dos sobrinas que han tramitado el proceso de obtención del visado para reunirse con él y escapar de la agresión de Arabia Saudí a Yemen.

A finales de enero, el fiscal general del estado de Washington (oeste), Bob Ferguson, presentó una demanda judicial contra la primera ley migratoria de Trump, calificándola de ‘ilegal e inconstitucional’. En esta misma línea, el juez de la Corte Federal de Seattle, en el mismo estado, James Robart dictaminó el pasado 3 de febrero una orden que dejó sin efecto, de forma temporal, el citado decreto migratorio.

Posteriormente, el Tribunal de Apelaciones de EE.UU. rechazó suspender la mencionada decisión judicial que bloqueaba la orden migratoria de Trump, como solicitó el Departamento de Justicia del país norteamericano en aquel entonces.

HispanTV.es

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