Según este informe, además de aumentar las querellas, crecen también las condenas a los agresores y las medidas de protección de las víctimas.
Frente al 62,6% de condenas que se produjeron en 2015, el pasado año el porcentaje de sentencias condenatorias se elevó hasta un 66,2%.
En todo el año 2016, las sentencias dictadas fueron 47.175, de las que 31.232 fueron condenas y 15.943, absoluciones.
El CGPJ asegura que las víctimas denunciaron en siete de cada diez casos, pero descendieron las presentadas por familiares y por el entorno de la maltratada que representaron un 1,44% del total.
"El aumento de las condenas a los maltratadores en más de tres puntos porcentuales respecto a 2015, la subida de casi once puntos en el número de denuncias presentadas por violencia de género en los órganos judiciales y los importantes incrementos en la adopción de medidas de protección de las víctimas, tanto de mujeres como de su hijos e hijas, son los datos más significativos de la estadística del año 2016", señala en su comunicado el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género.
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