En cuanto a la posibilidad de celebrar un referéndum durante el período correspondiente, Sturgeon destacó que no excluye esta posibilidad, así como prevé "seguir adelante por cualquier vía que sea racional para el país".
Señaló también que no va de farol sobre la posible separación de Escocia y añadió que muchos políticos ven el Brexit como un juego pero no es así y las consecuencias podrían ser bastante serias.
El Gobierno de Edimburgo estudia en los últimos meses la opción de convocar un segundo referéndum que permita a Escocia reconsiderar el asunto de la independencia antes de que el Reino Unido abandone la UE.
En el referéndum del 18 de septiembre de 2014, convocado por iniciativa del Partido Nacionalista de Escocia, Escocia votó a favor de seguir formando parte de Reino Unido con el 55 por ciento de apoyos.
Sputnik
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