El delegado catalán en Viena explicó en su misiva que su delegación es responsable de las relaciones con Austria, Eslovenia, Croacia, República Checa, Eslovaquia, Hungría, Polonia, Estonia, Letonia y Lituania.
"Estaría encantado si su agenda les permitiera que organizáramos un encuentro para conocernos personalmente e intercambiar puntos de vista", prosigue Casals en su carta a los europarlamentarios, a los que invita a concertar reuniones para su próxima visita a Bruselas entre el 28 y 30 de marzo.
El texto firmado por Casals destaca que la acción externa del Gobierno de Cataluña tiene "un nuevo estilo trasparente" que cuenta con "mirar hacia Europa" como una de sus "principales prioridades".
La carta del delegado catalán en Viena a los eurodiputados fue enviada el 15 de febrero, dos semanas después de que el presidente del Gobierno autonómico de Cataluña, Carles Puigdemont, ofreciese en Bruselas una conferencia para explicar el proceso soberanista que su Ejecutivo está desarrollando.
A ese acto acudieron cerca de 500 personas, lo que a ojos del Gobierno catalán fue todo un éxito.
Sin embargo, esa visita también sirvió para evidenciar las dificultades del Ejecutivo catalán para encontrar apoyos entre los altos cargos comunitarios al tratarse de la segunda visita consecutiva de Puigdemont a Bruselas sin que ningún representante de las instituciones europeas se reuniese con él
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