"…las salvas de la Revolución de Octubre nos trajeron el marxismo-leninismo"
Durante los años de Gobierno de Mao Tse Tung, la Revolución de Octubre era considerada como uno de los eventos más significativos de la historia. Los expertos chinos la calificaban como un `momento crucial` en la historia mundial y de China, que, junto al movimiento del 4 de Mayo de 1919, había dado inicio a la `era contemporánea`.
Incluso en los años en que las relaciones entre China y la URSS estaban en su peor momento, la Revolución de Octubre era celebrada y recordada; el Partido Comunista de China denunciaba que los principios de la `dictadura del proletariado` habían sido traicionados por los `revisionistas`, quienes habían tomado el poder en la URSS.
Sin embargo, con el inicio de las reformas económicas y la apertura del gigante asiático al mundo, la Revolución Rusa empezó a perder su significado. El país asiático prefirió desarrollar la idea de un socialismo propio, con un carácter específico que resaltaba el valor objetivo e histórico de la victoria del comunismo en el territorio. Entre otras cosas, los historiadores se dieron a la tarea de subrayar `el carácter autónomo` de la aparición y el desarrollo del movimiento comunista en China. Así, la Revolución de Octubre iba siendo recordada cada vez menos.
Las ideas de la `lucha de las clases` y la `dictadura del proletariado` fueron reemplazadas por las de una coexistencia pacífica y el desarrollo económico.
Fin de la URSS
Con el colapso de la Unión Soviética, los comunistas chinos se dieron a la tarea de resaltar los valores patrióticos y los logros económicos del comunismo en su propio país, en una época en que la ideología estaba de capa caída.
Hoy en día, los valores nacionales y la unión conseguida por el PC de China son los más importantes dentro de la historia comunista del país, por encima de los `valores rojos` de la revolución. Sin embargo, este trascendental acontecimiento es recordado y, sin duda, pavimentó el camino elegido por el gigante asiático en ese entonces y en su futuro, sentencia Andréi Karneev.
Sputnik
Etiquetas: