Las pesquisas que se realizaron en torno al segundo ataque, confirmaron la complicidad de Irma Krat, activista del Maidán, y Serguéi Nóvikov y Alexandr Visota, ambos excombatientes de un batallón de voluntarios nacionalistas.
En junio de 2014 una turba de más 1.500 individuos armados con hachas, bates de béisbol, piedras y cócteles molotov volcaron varios coches diplomáticos estacionados en el aparcamiento de la embajada rusa.
Luego los radicales arrojaron piedras contra la fachada del edificio que ocupa la embajada e intentaron incendiarlo.
La embajada de Rusia en Kiev envía nota de protesta a la Cancillería ucraniana
En septiembre de 2016, un grupo de radicales atacó con pirotecnia la sede de la misión diplomática, un hecho al que restó importancia el primer ministro ucraniano, Vladímir Groisman, al calificarlo de "incidente menor".
El Comité ruso de Investigación sostuvo que los jueces instructores hallaron pruebas suficientes que corroboran la participación de estos sujetos en esos actos criminales.
Los seis ucranianos también fueron acusados de atacar la institución diplomática para provocar una guerra y deteriorar las relaciones internacionales.Reuters
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