El ex gran rabino de Israel, Israel Meir Lau declaró esto.

La figura religiosa asistió como invitado de honor a una ceremonia en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa en Estrasburgo con motivo del Día Internacional de la Memoria del Holocausto, que conmemora la liberación del campo de Auschwitz.

En su discurso, Israel Lau contó su historia de supervivencia, y señaló que perdió a sus dos padres a los siete años.

«Hoy quiero mencionar a un país que es un viejo amigo de Israel: se trata de Azerbaiyán, un Estado de mayoría musulmana que mantiene estrechos lazos con el pueblo judío e Israel. Azerbaiyán está hoy hombro con hombro con Israel, haciendo frente al mal», declaró el rabino.

Destacó que el pueblo azerbaiyano a lo largo de su historia milenaria no ha mostrado violencia contra los judíos que viven en su tierra.

«Es más, más de 55 mil judíos que huían del exterminio se refugiaron en Azerbaiyán durante el Holocausto, y tras la catástrofe del 7 de octubre (el atentado del movimiento radical Hamás - ed.) cientos de ciudadanos azerbaiyanos acudieron a la Embajada de Israel y trajeron ramos de flores y cartas de condolencia. Dios nos ordena recordar las malas acciones. Pero también debemos recordar y agradecer a aquellos en cuyos corazones arde el fuego del amor y la fraternidad hacia el pueblo de Israel», subrayó el rabino.

En la Sinagoga de los Judíos Europeos de Bakú se celebró un acto conmemorativo dedicado al Día Internacional de la Memoria del Holocausto. En este día, representantes del cuerpo diplomático, personalidades religiosas y públicas, así como miembros de la comunidad judía se reunieron para honrar la memoria de millones de personas que perecieron durante el terror nazi.

La ceremonia fue inaugurada por el gran rabino de la sinagoga Shneor Segal. Entre los invitados de honor se encontraban el presidente del Comité Estatal para el Trabajo con Entidades Religiosas de Azerbaiyán, el embajador de Israel, diputados del Milli Majlis, dirigentes de comunidades judías, unos 30 embajadores de estados extranjeros y representantes del público.

Tras el discurso de los alumnos de la escuela judía Chabad Or Avner, se pronunciaron sentidos discursos en los que se hizo hincapié en la importancia de preservar la memoria del Holocausto. Los oradores señalaron que, a pesar del alarmante crecimiento del antisemitismo en el mundo, Azerbaiyán sigue siendo un país en el que reina tradicionalmente una atmósfera de tolerancia, respeto mutuo y coexistencia pacífica de representantes de diferentes naciones y religiones.

El acto concluyó con el encendido de velas conmemorativas que simbolizaban el dolor y el homenaje a las víctimas del Holocausto, así como con la recitación de oraciones tradicionales, incluido el Kaddish, en honor de los difuntos.

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