El artículo se centra en gran medida en la reciente visita oficial del primer ministro armenio Nikol Pashinián a Francia, su reunión con el presidente Emanuel Macron y la declaración de ambos. Conviene recordar que Francia y Armenia están unidas por lazos históricos, y dado que más de 600 mil armenios viven en Francia, este país contribuye al aumento del armamento de Armenia, lo que la parte azerbaiyana interpreta de otra manera. La parte oficial de Bakú acusa a Francia de fomentar la actitud beligerante de Armenia y de incitarla a hacer la guerra a sus vecinos.
A este respecto, el periódico entrevistó a Elchin Amirbayov, representante del presidente de la República de Azerbaiyán para misiones especiales. La entrevista refleja las ideas del funcionario azerbaiyano, que en su día fue embajador en Francia, sobre las negociaciones de paz. Amirbayov señaló que después de que Azerbaiyán liberara la región de Karabaj, que había estado bajo ocupación armenia durante 30 años, surgieron oportunidades para concluir un acuerdo de paz definitivo. En este contexto, destacó la última reunión de los líderes de ambos países en el marco de la Conferencia de Seguridad de Múnich.
En cuanto a las oportunidades emergentes para el desarrollo de las relaciones bilaterales y la conclusión de un acuerdo de paz, así como los lazos entre Azerbaiyán y Francia, Amirbayov destacó la importancia de la actual manifestación de buena voluntad por parte armenia, ya que la consecución de la paz depende de la voluntad política de Armenia.
En la entrevista, el representante oficial de Azerbaiyán también declaró que Armenia no ha renunciado oficialmente a sus reivindicaciones territoriales contra Azerbaiyán, ya que varios documentos adoptados en Armenia entre 1990 y 2000 contienen reivindicaciones geográficas y territoriales contra Azerbaiyán. Estas leyes siguen en vigor, lo que puede considerarse uno de los principales impedimentos para alcanzar un acuerdo de paz. Por otra parte, la aparición de estos documentos se interpreta como un signo de la falta de voluntad de Armenia para llegar a un acuerdo. Además, estos documentos constituyen una importante violación del derecho internacional porque la comunidad mundial reconoció Karabaj como territorio azerbaiyano cuando Azerbaiyán ingresó en la ONU en 1992. Mientras tanto, Armenia sigue ocupando pueblos azerbaiyanos y ha presentado una demanda contra Azerbaiyán ante el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya.
Elchin Amirbayov aclarando las absurdas declaraciones de la parte armenia sobre las reivindicaciones de Azerbaiyán en el territorio de Armenia, declaró en la entrevista que Azerbaiyán defiende la apertura de todas las rutas de transporte como resultado positivo del acuerdo de paz. Armenia, que mantiene cerradas sus fronteras con Azerbaiyán y Türkiye, y sólo tiene conexiones cómodas con Irán, se enfrenta a un dilema en esta cuestión.
En conclusión, el funcionario azerbaiyano afirmó que la firma de un acuerdo de paz y el establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países podrían reportar muchos beneficios, y la región ganaría importancia para el transporte de mercancías en tránsito. Así, la conexión de la parte principal de Azerbaiyán con Najchiván a través de las comunicaciones puede estimular el desarrollo del Corredor Medio y el transporte de mercancías de China a los países europeos. Amirbayov expresó su confianza en que los aspectos económicos y comerciales de esta cuestión sean de interés para Armenia.
En la entrevista también se abordaron los trabajos realizados en la capital cultural de Azerbaiyán, Shusha, y el retorno gradual de los antiguos desplazados internos a sus tierras natales, incluido el hecho de que para 2026 estará garantizado el regreso de 140 mil personas.
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