Se ha asignado a estos fines un edificio de tres plantas con 30 camas, sistemas de suministro de agua y electricidad, una cocina, un cuarto de baño, una sala de descanso y una lavandería en el centro de Khankandi. La limpieza y el equipamiento del edificio han concluido, y el 10 de octubre el refugio empezó a acoger residentes.
Los residentes disfrutan de comidas calientes y tentempiés tres veces al día. La seguridad externa del refugio corre a cargo de la policía.
Desde el 30 de septiembre de este año, dos psicólogos y dos trabajadores sociales han sido enviados a la ciudad de Khankandi para trabajar en el refugio, evaluando las necesidades primarias y el estado psicosocial de los residentes. Durante las visitas a los lugares donde viven las personas evaluadas, se les proporcionó información sobre la ubicación del refugio y el suministro de alimentos.
Seis personas ya han sido alojadas en el refugio, una ha sido derivada a servicios médicos y un total de 11 personas han utilizado el refugio.
Psicólogos y trabajadores sociales prestan actualmente servicios sociales a los residentes del refugio. También se ha destinado a un cocinero, personal técnico, etc. para trabajar en el refugio.
El alojamiento en el refugio es voluntario, y quienes no deseen pernoctar tienen la oportunidad de recibir tres comidas al día y la ropa necesaria, así como de utilizar los servicios sociales.
Los representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja también visitan el refugio varias veces al día, se familiarizan con las condiciones, se informan sobre el suministro de alimentos y los servicios sociales.
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