"Condenamos enérgicamente la declaración emitida por el Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia el 27 de septiembre de 2023, que distorsiona y desorienta abiertamente a la comunidad internacional sobre la guerra de 44 días y las medidas adoptadas después de la guerra.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia difunde narrativas falsas en esta declaración al tiempo que niega rotundamente su responsabilidad por más de 30 años de agresión militar y ocupación de los territorios de Azerbaiyán, masacres y crímenes de lesa humanidad cometidos contra Azerbaiyán.
La guerra de Azerbaiyán contra la ocupación y agresión de Armenia siempre ha sido una guerra justa, y las medidas antiterroristas adoptadas por Azerbaiyán en septiembre de este año anularon legítimamente una amenaza procedente de las fuerzas armadas ilegales armenias estacionadas en Azerbaiyán, en clara violación de todas las normas y principios del derecho internacional.
Además, contrariamente a las mentiras del Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia y a diferencia de la propia Armenia, Azerbaiyán nunca atacó a civiles armenios.
Con respecto a las afirmaciones infundadas sobre la falta de voluntad para resolver la situación por medios políticos y diplomáticos, nos gustaría recordar a la parte armenia cómo este país ha torpedeado todos los esfuerzos de paz no solo durante los 30 años de ocupación sino también durante el período posterior al conflicto.
Mientras que el 21 de septiembre el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, dijo que no existe una amenaza directa a la población civil, la difusión por todos los medios por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia de que existe una “limpieza étnica” de los armenios locales demuestra claramente cuán inconsistentes y falsas son la política y la narrativa de Armenia
Reiteramos que Azerbaiyán no tiene nada que ver con la decisión de los armenios locales de la región de Karabaj de Azerbaiyán de trasladarse a Armenia o a cualquier otro país. Estamos dispuestos a crear para ellos condiciones que les permitan vivir mejor que cuando eran rehenes de la junta militar creada por Armenia. Azerbaiyán está decidido a reintegrar a los residentes armenios como ciudadanos iguales y la Constitución, la legislación nacional de Azerbaiyán y los compromisos internacionales que hemos asumido proporcionan una base sólida para lograr este fin.
Entendemos cuánto duele a Armenia ver cómo un régimen separatista establecido en los territorios de Azerbaiyán se derrumba y desaparece ante sus ojos, pero ahora sería mejor para ellos centrarse en construir la paz y la confianza con Azerbaiyán, basándose en el respeto de la integridad territorial y la soberanía tanto de palabra como de hecho", señala el Ministerio.
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