El 27 de septiembre de 2020, el valiente Ejército de Azerbaiyán, bajo el liderazgo del Comandante en Jefe Supremo Ilham Aliyev, lanzó operaciones contraofensivas en todos los frentes para prevenir las provocaciones militares y las actividades de combate de las fuerzas armadas armenias y garantizar la seguridad de la población civil.

Así, el mismo día, en respuesta al inicio por parte de Armenia de nuevas provocaciones a gran escala, disparos contra posiciones del Ejército azerbaiyano y asentamientos civiles, se lanzó una operación de contraofensiva.

Durante los 44 días de la Guerra Patria, el presidente de Azerbaiyán, el comandante en jefe Ilham Aliyev, hizo llamamientos regulares al pueblo. Estos llamamientos levantaron al pueblo de Azerbaiyán, lo unieron estrechamente como un puño y tuvieron un fuerte impacto en el curso y el destino de la guerra. Cada llamamiento se convirtió en el preludio de nuevas victorias.

En su primer discurso al pueblo el 27 de septiembre de 2020, el presidente de Azerbaiyán animó a toda la sociedad a lograr una victoria decisiva.

El Presidente Ilham Aliyev se dirigió al pueblo por segunda vez el 4 de octubre, la tercera el 9 de octubre, la cuarta el 17 de octubre, la quinta el 20 de octubre y la sexta el 26 de octubre. En cada discurso del Jefe de Estado al pueblo se escuchaban nuevos evangelios y buenas noticias. Por eso los azerbaiyanos de todo el mundo esperaron y escucharon con impaciencia el discurso del Jefe de Estado.

El primer día de combates, junto con varias aldeas, el pico Murovdag, que es uno de los puntos estratégicos del Ejército de Azerbaiyán, quedó libre de la ocupación enemiga. Esto provocó un mayor aumento de la alegría y el entusiasmo tanto del personal como de la gente. Durante 44 días, los logros diarios en el campo de batalla impulsaron nuevas victorias. Así, el 3 de octubre, el Ejército azerbaiyano ya sacudió las posiciones enemigas en la dirección norte del frente liberando los asentamientos de Talish y Sugovushán. Al mismo tiempo, se escuchó el sonido de buenas noticias en el frente sur, donde los combates continuaron paralelamente. Por supuesto, fue el Comandante en Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, el Presidente Ilham Aliyev, quien informó de todas las buenas noticias al pueblo de Azerbaiyán.

El 4 de octubre, el anuncio del Comandante en Jefe Supremo sobre la liberación de Jabrayil indicó que se habían logrado importantes avances en la dirección sur del frente. La liberación de una serie de asentamientos del enemigo en los primeros diez días de octubre ya provocó un gran pánico en el ejército armenio. El enemigo, que estaba muy alarmado, sólo intentó salvar su vida huyendo de las filas del ejército y del campo de batalla. El Ejército azerbaiyano estaba expulsando al enemigo y liberando las tierras.

Con la liberación del asentamiento de Hadrut el 9 de octubre y de la ciudad de Fuzuli el 17 de octubre, la espalda del enemigo quedó rota. Como resultado de las victorias sobre el enemigo el día 21 de la guerra, los dirigentes políticos y militares de Armenia se dieron cuenta de su derrota. Por supuesto, no había vuelta atrás. Pero los combates continuaron con más ferocidad, y cada día el Comandante en Jefe daba órdenes, y cada día se oían nuevas buenas noticias en todo el frente. Con la liberación del asentamiento de Khudafarin el 18 de octubre, el Ejército azerbaiyano restableció otra justicia histórica en el frente sur. Sólo dos días después, el Presidente Ilham Aliyev trajo la buena noticia al pueblo, lo que agradó a todo el pueblo de Zanzíbar. Así, el 20 de octubre, la ciudad de Zangilan quedó libre de la ocupación enemiga. Un día después, el 21 de octubre, también fue liberado el asentamiento de Minjivan. Con la liberación del asentamiento de Aghband en el distrito de Zangilan el 22 de este mes, la sección de 132 kilómetros de la frontera estatal entre Azerbaiyán e Irán ocupada durante muchos años por las Fuerzas Armadas de Armenia quedó bajo control total. Ya faltaban unos días para finales de octubre. El Ejército azerbaiyano debía cumplir plenamente las tareas asignadas y liberar todas las tierras ocupadas. Así, el 25 de octubre, la ciudad de Gubadli quedó libre de la ocupación. Esta victoria, como las demás logradas, fue recibida con entusiasmo tanto por el personal como por el pueblo.

Los combates continúan, el Ejército azerbaiyano ya ha liberado gran parte de las tierras ocupadas. El siguiente objetivo era la ciudad de Shusha. El Comandante en Jefe dijo que nuestro trabajo estaría incompleto sin Shusha. Así, el 8 de noviembre, el Presidente de Azerbaiyán, Comandante en Jefe Supremo, Ilham Aliyev, en su discurso al pueblo en el Callejón de los Mártires, anunció que la ciudad de Shusha había sido liberada de la ocupación. Con la liberación de Shusha, el enemigo se vio obligado a arrodillarse ante el Ejército azerbaiyano. Después de la traspaso de Shusha al control de Azerbaiyán, Armenia aceptó su derrota y se vio obligada a firmar el acta de capitulación.

Las batallas por Shushá son una de las operaciones más exitosas de la Guerra Patria y culminaron con la victoria del Ejército azerbaiyano. Un día después de la liberación de Shusha, más de 70 asentamientos fueron liberados de la ocupación, el enemigo cayó de rodillas y no tuvo más remedio que firmar el acta de capitulación. El 10 de noviembre de 2020 se firmó el acta de capitulación de Armenia: "Declaración del Presidente de la República de Azerbaiyán, del Primer Ministro de la República de Armenia y del Presidente de la Federación de Rusia". Así, bajo el liderazgo del Presidente Ilham Aliyev, Azerbaiyán mostró su fuerza y ​​poderío ante el mundo entero, tanto en el campo de batalla como en la arena política.

Durante la Guerra Patria, el Jefe de Estado trazó una línea en el frente informativo de Armenia con sus entrevistas a los principales medios de comunicación del mundo. El presidente Ilham Aliyev se ha convertido en el heraldo de la verdad de Azerbaiyán en todo el mundo con sus discursos al pueblo, sus tuits y unas 30 entrevistas que concedió durante este período. El mismo día, en su octavo discurso a la nación, Ilham Aliyev anunció que todo Karabaj había sido liberado y que el conflicto armenio-azerbaiyano había terminado, con la frase "Karabaj es Azerbaiyán" que se había convertido en lema nacional. ​

Como resultado de la continuación de la victoria militar a nivel político, tres distritos fueron entregados a Azerbaiyán dentro de los 20 días posteriores a la Guerra Patria de 44 días: Aghdam el 20 de noviembre, Kalbajar el 25 de noviembre y Lachin el 1 de diciembre. En esta ocasión, el Presidente de Azerbaiyán una vez más hizo un llamamiento al pueblo el 1 de diciembre y afirmó que Aghdam, Kalbajar y Lachin fueron devueltos sin disparar un solo tiro y sin dar un solo mártir. Así, las tierras de Azerbaiyán, que fueron ocupadas gradualmente por unidades militares armenias durante 4 años y donde se construyeron fuertes fortificaciones militares, barreras y líneas de defensa en su territorio después de haber estado ocupadas durante casi 30 años, fueron liberadas en 44 días. Se restableció la integridad territorial de la República de Azerbaiyán y el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán pasó a la historia. En la Guerra Patria, Azerbaiyán obtuvo una brillante victoria y derrotó a Armenia, poniendo fin a la ocupación. Cada de estos 44 días es la gloriosa historia de Azerbaiyán. El pueblo y el Estado de Azerbaiyán guardan el brillante recuerdo de sus heroicos hijos que murieron por la Patria, los recuerdan siempre con especial respeto, aprecian los méritos de los veteranos y están orgullosos de ellos. Parte del equipo tomado como botín del ejército armenio se exhibió en un desfile militar en Bakú el 10 de diciembre de 2020, y también se exhiben en el Parque de Botín Militar, que se inauguró en Bakú en abril de 2021. En las zonas ya liberadas continúan las obras de restauración y reconstrucción y se están reconstruyendo todas las infraestructuras. Se construyen nuevas ciudades, pueblos y asentamientos. Ha comenzado el regreso a los territorios liberados. Las visitas de los azerbaiyanos a sus tierras natales y ancestrales se garantizan fácilmente. Por supuesto, los propietarios de todos los territorios liberados regresarán a sus países de origen.

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