"A pesar de la ocupación de territorios azerbaiyanos y del reconocimiento de este hecho por las 4 resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que exigen la retirada completa, inmediata e incondicional de las fuerzas de ocupación de los territorios de Azerbaiyán, durante la copresidencia francesa de la OSCE en el Grupo de Minsk en 1997-2020, el derecho internacional del conflicto, recordamos bien, contribuyó a mantener los resultados de la ocupación y el status quo en la región en lugar de encontrar una solución justa basada en ella.

Desde este punto de vista, consideramos la declaración de hoy de Francia, que no ha abandonado su política anterior ni siquiera en la actual situación posconflicto, sobre las medidas adoptadas en respuesta a las provocaciones de las fuerzas armadas armenias estacionadas ilegalmente en la región de Karabaj, como apoyo a los restos del período de ocupación.

Es bien sabido que Francia, que se destacó por su posición y declaraciones antiazerbaiyanas durante la Guerra Patria de 44 días, se mantuvo al margen de los esfuerzos de consolidación de la paz en la región en la situación posterior al conflicto, hizo declaraciones que sólo tuvieron un efecto negativo en el proceso y se aisló aún más de la región al mostrar una posición de apoyo al separatismo.

La posición de Francia hoy muestra que este país no ha aprendido de la situación actual que enfrenta en las regiones coloniales y continúa con su comportamiento y políticas anteriores en este sentido.

La Asamblea Nacional y el Senado son más activos que Armenia a la hora de emitir declaraciones y aceptar documentos contra Azerbaiyán.

La política islamófoba y antiazerbaiyana de Francia y su inaceptable interferencia en nuestros asuntos internos muestran que cuanto más lejos esté Francia de la región, mejor será para la región", afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores.

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