El acto, organizado por el Consejo de Coordinación de los azerbaiyanos residentes en el Reino Unido, se celebró para protestar contra el intento de Armenia de convertir de nuevo el Consejo de Seguridad de la ONU en un instrumento de campaña de manipulación política, militar e informativa.
Los participantes portaban banderas de Azerbaiyán y pancartas con lemas como "¡Exigimos justicia por la destrucción del entorno ecológico de Karabaj!", "¡Exigimos justicia para las víctimas de las minas!", "¡Exigimos justicia para los rehenes azerbaiyanos!", " ¡Liberen a los rehenes azerbaiyanos!", "¡Detengan el terrorismo medioambiental de Armenia!", "¡Las minas armenias matan a civiles!".
Los participantes del acto, que condenaron a Amnistía Internacional por su falta de respuesta hasta el momento ante estas aparentes violaciones, pidieron a la organización internacional que pasara a realizar actividades prácticas encaminadas a proteger el medio ambiente de la región azerbaiyana de Karabaj, poner fin al ecocidio perpetrado por Armenia, garantizar la seguridad y proteger los derechos humanos de los ciudadanos azerbaiyanos en Karabaj.
Se llamó la atención de los londinenses que mostraron interés por la acción sobre los crímenes de guerra y contra el medio ambiente de Armenia, que lleva 30 años aplicando una política agresora e invasora contra Azerbaiyán. Se señaló que las minas colocadas por las fuerzas armadas armenias en los territorios azerbaiyanos amenazan la vida de las personas, que después de la guerra el número de personas voladas por las minas en Azerbaiyán ha llegado a 303, se subrayó que la negativa oficial de Iravan a proporcionar mapas es ilegal y viola gravemente los derechos humanos de los azerbaiyanos.
Además, se destacó que los malos tratos infligidos a los azerbaiyanos, de los que los medios de comunicación armenios habían difundido pruebas fragmentarias, contradicen la III Convención de Ginebra y que varios soldados azerbaiyanos tomados como rehenes fueron sometidos a torturas físicas y morales y a insultos. Se subrayó que, como resultado de las inadmisibles acciones de Armenia en la región azerbaiyana de Karabaj, se han devastado más de 60 mil hectáreas de bosques y se han contaminado los ríos.
Al final del acto se presentó la resolución de la acción en la oficina de la organización no gubernamental internacional Amnistía Internacional.
Cabe señalar que la declaración del Consejo de Coordinación sobre la necesidad de conocer y apoyar los esfuerzos de paz de Azerbaiyán en la región también se envió a la ONU, Amnistía Internacional y otras organizaciones internacionales.

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