Durante las sesiones, que se llevan a cabo en el territorio de la unidad militar, se realiza un entrenamiento intensivo de los cadetes sobre diversos temas.
Los cadetes adquieren habilidades teóricas y prácticas en clases conducidas de acuerdo con la rutina diaria, además de participar activamente en actividades de entrenamiento físico y de ejercicios.
Durante los ejercicios de tiro realizados en el campo de entrenamiento, se mejoran las habilidades para usar varias armas, así como también se realizan prácticamente las tareas de detección y destrucción de objetivos con fuego en el "campo de batalla" y otras tareas.
Además, los cadetes que participan en el entrenamiento de montaña como parte del programa de entrenamiento de comando mejoran aún más sus habilidades de combate.
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