Durante la sesión informativa los participantes fueron informados sobre la situación actual y las realidades en la región en el período posterior al conflicto, el proceso de paz entre Azerbaiyán y Armenia.
Araz Azimov subrayó que, tras la guerra, Azerbaiyán presentó una iniciativa de paz y declaró su disposición a normalizar las relaciones con Armenia sobre una base bilateral, de conformidad con las normas y principios del derecho internacional, los principios de igualdad soberana, integridad territorial e inviolabilidad de las fronteras.
Se señaló que desde el primer día esta posición quedó clara para todos, y en la mesa de negociaciones se discutieron tres direcciones del proceso: la firma del tratado de paz, la delimitación de las fronteras y las decisiones sobre la apertura de las comunicaciones regionales. También se señaló que la manifestación más llamativa de la intención pacífica de Azerbaiyán en la actualidad son las obras de reconstrucción y construcción a gran escala llevadas a cabo en los territorios liberados de la ocupación, así como los aeropuertos construidos en zonas cercanas a las fronteras de ambos países. Se llamó la atención de los participantes en la sesión informativa sobre el hecho de que, en respuesta a ello, Armenia comete provocaciones militares en los territorios de Azerbaiyán en los que viven residentes armenios, utiliza interferencias de radio para obstruir las obras de los aeropuertos, lo que muestra claramente las verdaderas intenciones de ese país.
Azimov añadió que, a pesar de la clara posición de Azerbaiyán en la agenda de paz, son inaceptables las demandas irrazonables de Armenia, que no se ajustan a ninguna norma del derecho internacional ni a la lógica, y los intentos de interferir en los asuntos internos de Azerbaiyán. A pesar de que el primer ministro de la República de Armenia, Nikol Pashinián, hizo oficialmente una declaración sobre el reconocimiento de la integridad territorial y la soberanía de Azerbaiyán, se señaló que, en la práctica, las medidas adoptadas por Armenia contradicen directamente la integridad territorial y la soberanía de Azerbaiyán y van acompañadas de intentos de injerencia en los asuntos internos del país. En particular, se subrayó que los pasos dados están calculados para frenar el proceso de normalización y paz, crear nuevas crisis y discusiones que no sirven a la paz, sino a los peligrosos objetivos y agenda de Armenia.
Refiriéndose a la situación de la carretera de Lachin, el viceministro subrayó que, en primer lugar, esta carretera es parte integrante del territorio soberano de Azerbaiyán, y en este caso concreto Azerbaiyán ha establecido un paso fronterizo en su territorio para uso de sus ciudadanos. Se señaló que este derecho también estaba consagrado en la sentencia definitiva de la Corte Internacional de Justicia. Se llamó la atención sobre el hecho de que la parte armenia, que no aceptó esto, abrió fuego contra la guardia fronteriza azerbaiyana, cometió provocaciones contra la bandera estatal de Azerbaiyán, continuó abusando de la carretera de Lachin, y es la parte armenia la que impone restricciones a su uso. Azimov llamó la atención sobre el hecho de que Azerbaiyán ha creado las condiciones para el uso de la carretera por los residentes armenios de Karabaj con fines médicos, y se propone utilizar la carretera "Aghdam-Khankandi" para entregar más productos, lo que puede contribuir a su reintegración en la sociedad azerbaiyana.
Se llamó la atención de los participantes en la reunión informativa sobre el hecho de que Armenia, por un lado, impide el uso de estas oportunidades por parte de los habitantes armenios de Karabaj y, por otro, interfiere de forma demostrativa en los asuntos internos de Azerbaiyán bajo el nombre de "ayuda humanitaria", engañando a la comunidad internacional con sus espectáculos. Se hizo hincapié en que si la parte armenia apoya realmente la integridad territorial de Azerbaiyán, no debería oponerse al transporte de mercancías por la carretera "Aghdam-Khankandi" y obstaculizar el proceso de reintegración.
En este sentido, señalando la importancia de la responsabilidad de la comunidad internacional, el viceministro subrayó que antes de hacer declaraciones, cediendo a las manipulaciones de la parte armenia, es necesario pensar para qué servirán las declaraciones, así como evitar pasos que contradigan la soberanía y la integridad territorial de Azerbaiyán, incluyendo el uso de terminología errónea.
Se expresó gratitud a los países que han apoyado la organización de las conversaciones de paz y se señaló la importancia de que la comunidad internacional explique a Armenia que debe comprometerse con un diálogo constructivo.
La sesión informativa continuó con un turno de preguntas y respuestas.
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