"Escribimos esta carta para solicitarle cordialmente que envíe una misión a Armenia para facilitar el retorno pacífico, seguro y digno de los azerbaiyanos expulsados de Armenia.

Nuestra organización, creada en 1989, se ocupa de la protección de los derechos de los azerbaiyanos expulsados de Armenia.

La expulsión de los azerbaiyanos del actual territorio de Armenia, donde una vez constituyeron una mayoría absoluta, se completó en 1991. Como resultado de la limpieza étnica, no queda ni un solo azerbaiyano en Armenia. El patrimonio histórico y cultural azerbaiyano, incluidas mezquitas y cementerios en Armenia, fue destruido a gran escala, y se cambiaron todos los topónimos azerbaiyanos.

La expulsión de azerbaiyanos de Armenia es una injusticia sin precedentes por sus dimensiones políticas, jurídicas y humanitarias. Queremos que se repare esta injusticia. Basándonos en el derecho al retorno consagrado en la Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y otros importantes actos internacionales, aspiramos a regresar a nuestros hogares con seguridad y dignidad.

Hemos desarrollado y publicado nuestro concepto para un retorno pacífico, seguro y digno, que se distribuyó como documentos oficiales del Consejo de Seguridad, la Asamblea General y el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas con los números de referencia A/77/801-S/2023/134 y E/2023/53, respectivamente.

Al igual que en otras situaciones similares, posibilitar el retorno voluntario, seguro y digno de los azerbaiyanos expulsados de Armenia requiere una importante aportación internacional. Para empezar, la mejor forma de garantizar el retorno es que se produzca en el marco de disposiciones legales adecuadas. El proceso de retorno requerirá una asistencia de seguridad, humanitaria y socioeconómica adecuada por parte de la comunidad internacional. El mantenimiento de la paz, la supervisión, la rendición de cuentas, la intervención y otras actividades necesarias a nivel internacional son necesarios para evitar una nueva expulsión, discriminación y daños a la población retornada. También serán necesarias medidas adecuadas de reconstrucción y reconciliación bajo supervisión internacional para garantizar la rehabilitación y reintegración sostenibles de los retornados.

Nos gustaría reiterar que nuestra legítima exigencia a Armenia de que garantice nuestro derecho a un retorno seguro y digno no puede ser malinterpretada como perjudicial para la integridad territorial o la soberanía de Armenia.

En un intento de lograr la justicia y la reconciliación basadas en los derechos humanos, nos dirigimos directamente al gobierno de Armenia con una petición para iniciar el diálogo.

Creemos en los derechos humanos y en la igualdad de los seres humanos ante la ley. Ignorar los derechos de los azerbaiyanos de Armenia es perpetuar la injusticia. No ayuda al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.

Por lo tanto, le rogamos que apoye nuestra causa con sus buenos oficios como secretario general de la ONU, y envíe una misión interinstitucional de la ONU a Armenia, que podría realizar las siguientes tareas:

- evaluar la situación general e identificar los pasos para la creación de condiciones que conduzcan al retorno voluntario en condiciones de seguridad y dignidad;

- identificar las necesidades del proceso de repatriación en términos de ayuda humanitaria internacional y programas de rehabilitación, reconstrucción y reintegración a largo plazo;

- identificar las medidas legislativas y ejecutivas que Armenia tiene que aplicar para garantizar los derechos, las libertades y la seguridad de los repatriados azerbaiyanos, y su reintegración, así como los pasos necesarios para lograr la reconciliación;

- evaluar el estado del patrimonio cultural azerbaiyano e identificar los pasos necesarios para restaurar las piezas del patrimonio dañadas y obliteradas;

- realizar un inventario de los bienes incautados ilegalmente a los azerbaiyanos;

- recabar información sobre el impacto del conflicto en los derechos de los azerbaiyanos étnicos, que se vieron obligados a huir de sus hogares en Armenia

- idear y aplicar Medidas de Fomento de la Confianza sobre, entre otras cosas, permitir que los habitantes azerbaiyanos expulsados de Armenia visiten sus hogares, cementerios, lugares sagrados y patrimonio cultural en este país;

- llevar a cabo una evaluación técnica sobre el terreno de la situación de seguridad con vistas a un posible papel de seguridad internacional en apoyo de la repatriación.

Como parte interesada, seguimos dispuestos a interactuar con la ONU en la realización de actividades que garanticen el derecho al retorno de los azerbaiyanos expulsados de Armenia, y contribuir así al mantenimiento de la justicia, la paz y la seguridad en la región."

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