Según AZERTAC, el informe cubrió en gran medida la acción de protesta en la carretera Lachin-Khankandi, en la que participaron ecologistas, activistas, voluntarios de las organizaciones no gubernamentales de Azerbaiyán y que protestaban contra la explotación ilegal de los recursos naturales en los territorios de Azerbaiyán, donde las fuerzas de paz rusas están desplegadas temporalmente. Se observa que los ecoactivistas lanzan consignas exigiendo el fin del expolio de los recursos naturales. Los activistas no impiden la circulación de los vehículos humanitarios.

Sin embargo, la prensa armenia y los medios de comunicación prorrusos difundieron información errónea según la cual Azerbaiyán habría provocado una catástrofe humanitaria en la ciudad de Khankandi, densamente poblada por armenios. Cuando en realidad, las condiciones de vida normales en la zona poblada por armenios en Karabaj se mantienen.

El informe también refleja las opiniones de Volodymyr Kreidenko, diputado de la Rada Suprema de Ucrania y copresidente del grupo interparlamentario de amistad ucraniano-azerbaiyano. El diputado señaló que en la parte de Karabaj donde viven los armenios no hay ni bloqueo ni desastre económico; los armenios viven su vida habitual.

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