En medio de masivas protestas en Irán, el multimillonario Elon Musk activó su servicio de internet satelital Starlink en ese país, luego que el gobierno islámico decidiera cortar la conexión abruptamente como respuesta a las manifestaciones.
El dueño de Tesla y Space X tomó la decisión luego que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos autorizara este viernes a las empresas tecnológicas estadounidenses a expandir su negocio en Irán en medio de los recientes acontecimientos.
Irán vive una ola de fuertes protestas en todo el país desencadenadas por la muerte de Mahsa Amini, una mujer de 22 años detenida por la policía de la moral; y que fue acusada de llevar un “atuendo inadecuado”. Ya hay por los menos 26 muertos ante la represión del gobierno.
En este contexto, el secretario de Estado Antony Blinken aseguró que la autorización a las empresas tecnológicas permitirá contrarrestar los esfuerzos de control implementados por el gobierno islámico. ”Está claro que el gobierno iraní le teme a su propio pueblo”, dijo Blinken en un comunicado.
El funcionario de Joe Biden realizó una publicación en Twitter en ese mismo sentido. Y fue a través de esa misma red social que Elon Musk confirmó su decisión. “Activando Starlink”, escribió el multimillonario en la plataforma que alguna vez quiso comprar.
Se trata de una medida similar a laadoptada en Ucrania, donde permitió en todo el país, la conexión a internet, que se había visto afectada por la invasión rusa lanzada el 24 de febrero. A través de Starlink, la población iraní, podría acceder a conexión contra la voluntad del gobierno, que mantiene un férreo control.
La autorización de Estados Unidos se produce días después que Musk solicitara una licencia de exportación para brindar servicios a Irán. La Casa Blanca mantiene un duro régimen de sanciones a las firmas que hagan negocios con Teherán. Eso también puede verse en la trama del avión venezolano-iraní retenido en el país.
La modificación de la licencia de exportación permitirá el acceso a software, incluidas herramientas antivirus y de malware, así como servicios de computación en la nube y videoconferencia que permitan que el pueblo iraní acceder a “información basada en hechos”, según indicó el Tesoro estadounidense.
No obstante, funcionarios estadounidenses reconocieron ante la prensa que la decisión no tiene un impacto inmediato por cuanto “no elimina cada herramienta de represión en las comunicaciones”, según consignó la agencia AFP.
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