El 24 de agosto, Turquía lanzó la operación militar Escudo del Éufrates cuyo objetivo, según el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, era expulsar a los terroristas de los territorios fronterizos del norte de Siria y crear una zona de seguridad para los desplazados internos. El Gobierno sirio protestó reiteradamente por la intervención militar de Turquía en el norte de Siria, al subrayar que viola la soberanía del país. También los kurdos sirios condenaron la operación turca que, a su juicio, apunta contra ellos más que contra Daesh.
Sputnik
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