AZERTAC informa refiriéndose a la Embajada de la República de Azerbaiyán en México, que el periodista que visitó Jabrayil, Fuzuli, Ganja, Aghdam y Shusha, primero habló sobre la importancia militar-estratégica de Shusha, su significado histórico, cultural y simbólico para Azerbaiyán. Señaló que la liberación de Shusha se convierte en un símbolo de la restauración de la integridad territorial de Azerbaiyán.

"Durante los 44 días de guerra, Armenia atacó a civiles azerbaiyanos y disparó cohetes contra la ciudad de Ganja, situada lejos de las operaciones militares, matando a decenas de civiles, entre ellos mujeres y niños, e hiriendo a cientos", destaca el artículo.

"Las ciudades de Jabrayil y Aghdam han sido objeto de un excepcional vandalismo armenio, donde las infraestructuras residenciales y los monumentos históricos y culturales han sido completamente destruidos".

El artículo hace referencia a la plantación masiva de minas llevada a cabo por Armenia en los territorios ocupados durante casi 30 años. "Desde el acuerdo de alto el fuego alcanzado el 10 de noviembre del año pasado, cientos de militares y civiles azerbaiyanos han muerto a causa de las minas terrestres colocadas por las fuerzas armadas armenias a lo largo de los años. Los trabajadores de los medios de comunicación azerbaiyanos fueron víctimas de estas minas en el pueblo de Susuzlug, en el distrito de Kalbajar, a principios de junio. En la actualidad, Armenia se niega a facilitar un mapa de las minas terrestres, violando el derecho internacional humanitario, al igual que lleva casi 30 años ignorando las resoluciones de la ONU.

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