Así  lo reza el informe extendido por Amnesty International.

Según la información, en varias grabaciones de vídeo verificadas se refleja un cruel tratamiento con los prisioneros de guerra y rehenes, además la profanación de los cuerpos de los soldados azerbaiyanos por el lado armenio.

A continuación, se resalta que a lo largo de un año se restringió el derecho de expresión y reuniones: a principios, debido al régimen de la situación extraordinaria, que estuvo en vigor del marzo a septiembre por la Covid-19, luego, debido al estado de guerra, puesto en septiembre, que duró hasta los fines del año por los enfrentamientos armados con Azerbaiyán.

"En el marco del régimen de la situación extraordinaria, las autoridades obligaron a 20 ediciones a borrar o cambiar la información considerada como " una fuente de propagación de pánico". Tras una seria crítica en abril por parte de las organizaciones de defensa de derechos nacionales e internacionales, las restricciones en los medios de comunicación fueron eliminadas.

El estado de guerra causó las restricciones a la libertad de expresión y reuniones. El 9 de octubre el parlamento aprobó el anteproyecto de la ley "sobre la extensión de información informal" sobre el conflicto y los asuntos de la seguridad nacional, incluso la cualquier crítica de la actividad bélica y las declaraciones del poder. Las restricciones puestas por el estado de guerra a la libertad de reunión, fueron ejecutadas en noviembre una vez firmado el acuerdo sobre el cese el fuego para prohibir las manifestaciones antigubernamentales, que exigían la dimisión del primer ministro", reza el informe.

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