Como informa el corresponsal regional de AZERTAC, el pueblo de Mardanli, donde antes bullía la vida, durante la ocupación armenia se ha convertido en ruinas. Las casas fueron destruidas, sólo quedan ruinas de los muros derrumbados.

Y el florecimiento de un árbol frutal, que creció entre las ruinas en pleno invierno, es una especie de símbolo de añoranza de sus actuales propietarios.

Pero también hay nuevas construcciones aisladas, que dan testimonio de los asentamientos ilegales de armenios en Mardanli.

La operación de liberación del distrito de Gubadli duró varios días. Tras la liberación de la ciudad de Zangilan el 20 de octubre, la siguiente dirección para los militares azerbaiyanos fue la región de Gubadli. Los armenios construyeron aquí fuertes fortificaciones y crearon una base militar a la entrada de la ciudad. Según el plan de acción, era necesario tomar las alturas para liberar Gubadli en primer lugar. Porque el enemigo bombardeaba regularmente a nuestras tropas desde esas alturas, así como desde el territorio de Armenia. Desde este punto de vista, la operación de Gubadli requería una profesionalidad y una valentía especiales. El ejército azerbaiyano, haciendo gala de esta profesionalidad y dedicación, limpió en poco tiempo Gubadli del enemigo.

Los habitantes de Mardanli esperan el día en que vuelvan a sus tierras ancestrales, para construir y crear de nuevo, para vivir felices en sus aldeas, tierras natales. Ese día no está lejos.

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