El secreto de la extraña escena en la película soviética, o las razones ocultas de la profanación armenia de cadáveres - VIDEO

  03 Marzo 2021    Leído: 1416
  El secreto de la extraña escena en la película soviética,  o las razones ocultas de la profanación armenia de cadáveres -  VIDEO

- Tenemos información precisa de que los saboteadores operan aquí. Cavan tumbas, sacan los cuerpos de los que murieron por la peste, les extirpan el corazón y el hígado, los dividen en partes y propagan la enfermedad ...

Estas palabras son de la famosa película soviética "Libro abierto" (1977). La parte 6 de la película, sobre la vida de un joven microbiólogo que lucha contra enfermedades infecciosas, trata de los armenios que viven en Karabaj.

Un día, un oficial del Comisariado del Pueblo para Asuntos Internos, abreviado como NKVD,  se acercó a los médicos de enfermedades infecciosas que trabajaban allí, les contó lo que habían recibido y les exigió que se abrieran las tumbas. Objeto de los médicos: si bien el microbio portador de la plaga se puede propagar fácilmente en el laboratorio, ¿por qué los saboteadores deberían usar un método tan difícil como extirpar los órganos internos de los muertos? Pero obedecen la orden y se horrorizan: resulta que las cabezas, corazones e hígados de los cadáveres armenios en algunas de las tumbas fueron cortados y llevados ...
(Presentamos esas partes de la película sobre Karabaj)

 

Durante la era soviética, la mayoría de nosotros no prestamos mucha atención a este episodio. Pero ahora, bajo la influencia de los acontecimientos recientes, es necesario adoptar un enfoque diferente: ¿por qué los armenios deberían abrir tumbas y extirpar los órganos internos de los cadáveres? ¿Y esto puede estar relacionado de alguna manera con la exhumación de los muertos en Kalbajar y la destrucción de tumbas en Aghdam?

De hecho, sabíamos desde el principio que cometían atrocidades especiales en los cementerios junto con nuestros monumentos históricos. Pero cuando nos encontramos con los cementerios destruidos en las tierras liberadas, vimos otro espectáculo horrible. En otras palabras, nuestros vecinos salvajes no solo destruyeron lápidas en los cementerios, sino que también cavaron tumbas y quitaron huesos. ¿Por qué? ¿No es esto una continuación de algún antiguo y mal hábito?

En general, es un hecho que de vez en cuando los armenios se distinguen por sus abominables hechos en el tema de cadáveres, tumbas y funerales. Por ejemplo, durante la Primera Guerra de Karabaj en la década de 1990, los militares armenios realizaron rituales que fueron recordados con atrocidades especiales en las tumbas de sus compañeros de armas muertos.

Anteriormente, simplemente explicamos que los armenios estaban cavando cementerios en los territorios ocupados de Azerbaiyán, que están buscando dientes de oro aquí ... Pero con el tiempo, ha quedado claro que la codicia de este pueblo proviene de razones más serias. Tal hábito proviene de otra salvaje costumbre y deseo único que reside en el código genético de este pueblo, que es ajeno al Cáucaso. El nombre de este deseo es anibalismo. ¡Sí, anibalismo armenio!

No es una coincidencia que en el siglo XXI, los armenios, que pasaron a primer plano como una comunidad de excavación de fosas comunes, de hecho hayan mostrado una tendencia a volver a las enfermedades de sus antepasados, el anibalismo. Ésta no es una enfermedad. Porque el anibalismo armenio es un hábito que nace no solo de problemas psicológicos, sino también de diferentes deseos.

Por ejemplo, si miramos la historia, podemos ver algunos hechos. Incluso hay artículos sobre este tema en fuentes armenias:

"Los armenios vendían carne humana que pesaba entre 326 y 408 gramos a 100 decanos. Incluso vendían carne humana enlatada ". (Fuentes armenias sobre mong) .

Cuando miramos otras fuentes, vemos hechos terribles. Las memorias del famoso biólogo soviético Lev Zilber sobre la lucha contra la peste en Karabaj en la década de 1930 son dignas de mención en este sentido:

"El Comisariado de Salud del Pueblo de Azerbaiyán llama urgentemente a Lev Zilber. A las 04:00 de la noche, el profesor partió hacia Karabaj en tren con el equipo y el personal necesarios. El objetivo era prevenir la peste. Los representantes locales del Comisariado del Pueblo de Asuntos Internos en Karabaj dijeron que los saboteadores extranjeros - exploradores - habían abierto tumbas, cortado el corazón y el hígado de los cadáveres y propagado la infección. Pero Zilber calificó esta versión como una tontería: "En unos pocos días, un laboratorio puede preparar un virus de la peste y matar a miles de personas. ¿Por qué los saboteadores cortan los cuerpos de los cadáveres? Después de todo, ellos mismos pueden infectarse".

Zilber fue llevado al cementerio armenio. Abre unas 10 tumbas nuevas a la luz de antorchas. El científico estaba horrorizado. De hecho, algunos cuerpos no tenían cabeza y a algunos se les extirpó el bazo, el hígado o el corazón.

"La tercera tumba que abrimos pertenecía a una mujer. Cuando se quitaron la ropa, vimos que la luna estaba viva, qué es esto. El cuerpo de la mujer fue desmembrado y le quitaron el corazón y el hígado", escribió Zilber.

Zilber declara la cuarentena general, pero no cree en las noticias del sabotaje. Encuentra en revistas médicas antiguas que había una peste en el área, y ahora la enfermedad ha revivido.

Un profesor local que habla un poco de ruso le revela el secreto a Zilber. Dice que existe una creencia entre la población armenia que vive en Karabaj: “Si hay una serie de muertes en la familia, creen que la primera persona muerta está viva. Si está vivo en la tumba, entonces "vendrá a llevarse" a otros parientes. Se utiliza un método extraño para determinar si los muertos están vivos. Llevan al caballo a la tumba y le dan avena. Si el caballo no come avena en la tumba, entonces la persona muerta está viva, y la tumba debe ser desenterrada y la cabeza o el corazón y otros órganos extraídos. Los órganos extraídos se cortan y se entregan a otros miembros de la familia, quienes se los comen y así escapan a la muerte".

Es después de este misterio que Zilber descubre que la infección que una vez existió en la región se propaga de esta manera. Puede prevenir la propagación de infecciones.

Este incidente en Hadrut es un gran ejemplo de hanibalismo armenio en el siglo XX.

Una película de 1977 de Lenfilm sobre la peste de Hadrut trata sobre el hanibalismo armenio. Incluso es digno de mención que en la película, en algunas escenas, la tribu, portadora de la enfermedad, habla en el armenio. En general, existen ciertas versiones sobre la historia de la infección de los armenios por el hanibalismo. Según la versión principal, vivían entre las tribus que alguna vez existieron en la India y todavía se alimentan de carne humana. Más tarde, moviéndose hacia el oeste, llevaron las tradiciones del hanibalismo a Karabaj.

Umberto Eco escribe en El nombre de la rosa que en la Edad Media, el hanibalismo en la Iglesia armenia estaba al nivel de falsa creencia.

Quién sabe, tal vez si miras en los archivos cerrados del Vaticano, que no se dan a conocer al público, encontrarás docenas de hechos sobre el anibalismo armenio. De hecho, el hanibalismo armenio y las costumbres salvajes escondidas en las páginas oscuras de la historia permanecen en sus cerebros hoy, y estas costumbres y hábitos se manifiestan hoy de diversas formas.

Cabe destacar que, con base en la ciencia, vemos que el canibalismo ocurre no solo entre humanos sino también en animales. En los animales, este comportamiento se debe principalmente al instinto de buscar alimento en zonas desnutridas. Pero a veces las personas con problemas psicológicos pueden comportarse de forma caníbal, incluso en circunstancias normales.

El hecho de que los armenios tengan una historia y hábitos especiales sobre el canibalismo, el amor por las tumbas y los cadáveres y las atrocidades cometidas por ellos demuestra que todavía sufren los problemas psicológicos del canibalismo.

Por cierto, permítanos recordarle que los armenios también manifestaron estas tendencias caníbales en diversas formas en el genocidio de Joyalí, en el que Azerbaiyán conmemoró a las víctimas del genocidio el 26 de febrero. Los psicólogos han demostrado que la mayoría de los caníbales, que padecen enfermedades mentales y sufren de canibalismo, matan sus víctimas con especial crueldad. Aunque no existe una explicación científica exacta para esto, es un hecho comprobado que quienes comen cadáveres humanos tienden a matar a otros con especial crueldad. A veces, incluso un animal salvaje no mata a su presa si tiene un bebé en el útero. Estas personas eran los armenios caníbales que cortaron el útero de una mujer embarazada y mataron al bebé frente a ella. También estrangularon a otro bebé clavándolo en la pared y metiéndole en la boca el pecho amputado de su madre. Disfrutaron haciendo todas estas brutalidades como lo hicieron sus abuelos caníbales. Incluso no dudan en fechar todo esto en sus libros de escritores "heroicos".

El escritor y poeta armenio Zori Balayan dice en su libro "Renacimiento de nuestra alma":

"Cuando Khachatur y yo entramos en la casa que tomamos en Joyalí, nuestros soldados clavaron a un niño turco de 13 años en la ventana. Para evitar que el niño turco hiciera demasiado ruido, Khachatur insertó el pecho amputado de la madre del niño en su boca. Luego despellejé la cabeza, el pecho y el abdomen de un turco de 13 años. Miré el reloj, el niño turco perdió sangre 7 minutos después y murió. Mi alma estaba orgullosa de la alegría. Khachatur luego desmembró el cuerpo del niño muerto turco y se lo arrojamos a perros del mismo origen que el turco. Hicimos lo mismo con 3 niños turcos más por la noche ".

También señala: “Cumplí con mi deber como armenio. Sabía que todos los armenios estarían orgullosos de nuestras acciones".

La mujer azerbaiyana, Mehriban, que fue tomada como rehén en Joyalí, habla sobre sus terribles recuerdos del canibalismo armenio:

"Cortaron las cabezas, los brazos de los muertos y quitaron los ojos de los cadáveres. Cocinaron las cabezas cortadas y se las dieron de comer a los prisioneros detenidos en Askeran, y lo disfrutaron ... Serzh Sargsyán, quien despellejó a una niña de 13 años, también dijo que le gusta despellejar ".

Déjeme contarle otro ejemplo. Hablando sobre los horrores de ser prisionero, Mikayil de Kalbajar dijo: "La gente sedienta de sangre cortó la carne de un niño decapitado en pedazos y ensartó en un palo para cocinar como un kebab. Obligaron a cada prisionero a comer esa carne con un arma en la cabeza ". ("Escape del campo de exterminio")

Después de todo esto, los armenios comenzaron a cavar las tumbas en Kalbajar y a llevar los cuerpos de sus familiares. No es solo porque saben que no regresarán a estas áreas, sino también por sus tradiciones caníbales históricas, deseos subconscientes en sus códigos genéticos.

Como hemos señalado, el canibalismo armenio ha sido probado en sus fuentes históricas, y en otras fuentes enumeradas también se confirmó la tendencia de esta nación anormal a comer carne humana. Estas tendencias caníbales únicas, que no se encuentran entre los pueblos del Cáucaso, aún son visibles entre sus costumbres secretas.

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