La ceremonia de conmemoración de las víctimas del ataque de la mañana del 6 de agosto de 1945 se llevó a cabo en el Parque Conmemorativo de la Paz, de la ciudad japonesa.

Guterres envió un mensaje de video a la ceremonia en el que enfatizó que las naciones se han alejado de la meta de un mundo sin armas nucleares.

"La división, la desconfianza y la falta de diálogo amenazan con llevar a una competencia nuclear estratégica sin restricciones", dijo Guterres.

Al advertir que existe un riesgo muy alto del uso deliberado o accidental de armas nucleares, Guterres dijo: " Reitero el llamado a salvaguardar y fortalecer los instrumentos y políticas de no-proliferación y desarme”.

“Los Estados tendrán la oportunidad de retornar a esta visión compartida el próximo año, durante la conferencia para revisar el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares”, agregó.

Por su parte, el primer ministro japonés, subrayó las diferencias en el enfoque de los países frente a las armas nucleares y las graves preocupaciones de seguridad que estas provocan en el mundo.

“Japón trabajará persistentemente por un mundo libre de armas nucleares. Los países deben eliminar la desconfianza a través de la participación y el diálogo mutuo'', dijo.

Al afirmar que Japón actuará como un puente entre las potencias nucleares y los Estados que no poseen este tipo de armas, Abe dijo que su objetivo es transmitir las historias de las víctimas de las bombas atómicas a las nuevas generaciones.

Los presidentes y líderes mundiales enviaron videomensajes con motivo de la fecha que fueron reproducidos durante la ceremonia.

anadolu

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