Esto fue dicho por la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores, Leyla Abdullayeva, según informa AZERTAC.
En sus palabras, la continuación de la política de los dirigentes armenios, que llegaron al poder al amparo de la "revolución democrática", prometieron al pueblo las montañas doradas, establecieron un régimen dictatorial, violaron la separación de poderes en el país, no cumplieron las promesas, reforzaron la política de ocupación iniciada por el régimen criminal anterior, violando así las normas y principios del derecho internacional, ya indica la verdad revelada y las mentiras del primer ministro de Armenia.
"Las recientes declaraciones y acciones del primer ministro de Armenia hablan de sus intentos de encubrir sus fracasos dentro del país agravando el conflicto y la situación en la región. De lo contrario, ¿cómo se pueden explicar las últimas acciones de provocación de los dirigentes del país agresor contra Azerbaiyán?
Como señala, los dirigentes de la Armenia invasora deben saber que ninguna provocación quedará sin respuesta: "El pueblo azerbaiyano, bajo la dirección del jefe de Estado, sobre la base de las normas y principios del derecho internacional, así como de la legislación azerbaiyana, garantizará la integridad territorial del país dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas". Los dirigentes de Armenia son directamente responsables de la ocupación militar de los territorios de Azerbaiyán, que constituye una violación de los derechos fundamentales de cientos de miles de azerbaiyanos que han sido objeto de depuración étnica en esos territorios. También deberá rendir cuentas a su pueblo y a todos por los actos delictivos".
Cabe recordar que el conflicto entre los dos países del Cáucaso Meridional surgió en 1988 debido a las reivindicaciones territoriales de Armenia contra Azerbaiyán. Nagorno-Karabaj y siete distritos adyacentes -el 20% del territorio de Azerbaiyán- están bajo la ocupación de las fuerzas armadas de Armenia.
Las partes alcanzaron un alto el fuego en mayo de 1994, y las conversaciones de paz siguen siendo infructuosas bajo los auspicios del Grupo de Minsk de la OSCE y copresididas por Rusia, Francia y los Estados Unidos.
Las cuatro resoluciones adoptadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la liberación de la región ocupada de Nagorno-Karabaj y sus territorios adyacentes todavía no son aplicadas por Armenia.
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