Así se afirma en la declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán, distribuida en relación con las "elecciones" ilegales celebradas por Armenia en los territorios azerbaiyanos ocupados el 31 de marzo de 2020, según informa AZERTAC.

"En relación con los planes de Armenia de celebrar las denominadas "elecciones" el 31 de marzo de 2020 en los territorios azerbaiyanos ocupados, el Ministerio de Relaciones Exteriores declara lo siguiente.

Con el telón de fondo de la actual ocupación militar y la limpieza étnica de los territorios de Azerbaiyán por parte de Armenia, la celebración de "elecciones" en los territorios ocupados de Azerbaiyán es una clara violación de la Constitución de Azerbaiyán, así como de las normas y principios del derecho internacional, incluida la Carta de las Naciones Unidas, el Acta Final de Helsinki de 1975 de la Comisión de Seguridad y Cooperación en Europa y las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y, por consiguiente, no tiene validez jurídica.

El régimen ilegal establecido por Armenia en los territorios ocupados de Azerbaiyán es producto de la agresión, la depuración étnica y la discriminación racial, y está bajo la dirección y el control de Armenia.

La comunidad internacional condena en los términos más enérgicos posibles el uso de la fuerza militar contra Azerbaiyán y la posterior ocupación de sus territorios. En 1993, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó cuatro resoluciones en las que se condenaba la ocupación de los territorios de Azerbaiyán y se reafirmaba el respeto de la soberanía y la integridad territorial de Azerbaiyán y la inviolabilidad de sus fronteras internacionalmente reconocidas. En esas resoluciones, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas también reafirmó que la región de Nagorno-Karabaj es parte integrante de Azerbaiyán y exigió la retirada inmediata, completa e incondicional de las fuerzas de ocupación de todos los territorios ocupados de Azerbaiyán. Otras organizaciones internacionales también han adoptado una posición similar.

En consecuencia, la comunidad internacional ha rechazado de manera inequívoca y sistemática todos los anteriores espectáculos "electivos" realizados por la República de Armenia en los territorios ocupados de Azerbaiyán y, por lo tanto, ha negado cualquier pretexto que Armenia utilice cínicamente para justificar su aparente falta de respeto por el derecho internacional, la soberanía y la integridad territorial de la República de Azerbaiyán y los derechos humanos de la población expulsada de los territorios ocupados.

Las elecciones en la región de Nagorno-Karabaj de Azerbaiyán sólo pueden celebrarse en el marco de la Constitución de Azerbaiyán y con la participación de toda la población de la región. Las elecciones sólo serán posibles después de la retirada de las fuerzas de ocupación armenias de los territorios ocupados, el regreso de la población azerbaiyana expulsada a sus lugares de origen y el restablecimiento del diálogo y la cooperación entre las comunidades armenia y azerbaiyana de Nagorno-Karabaj.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán reitera que la solución del conflicto armenio-azerbaiyano de Nagorno-Karabaj sólo es posible sobre la base de la soberanía y la integridad territorial de Azerbaiyán dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas. La ocupación militar del territorio de Azerbaiyán no es una solución y cualquier intento de imponer un hecho consumado, incluso mediante la organización de "elecciones" ficticias, nunca conducirá a los resultados políticos deseados por Armenia y no traerá ninguna perspectiva positiva para ese país. Azerbaiyán nunca aceptará la ocupación de sus territorios reconocidos internacionalmente".

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