"La República Checa suspenderá inmediatamente las licencias de exportación para materiales bélicos a Turquía", escribió Hamacek el lunes en su cuenta de Twitter, al reunirse con el primer ministro checo, Andrej Babis, y el ministro de Industria y Comercio de Chequia, Karel Havlicek.
Antes de la reunión, Hamacek dijo ante la prensa que las exportaciones de armas checas a Turquía equivalen a unos 130-140 millones de coronas (unos 5,6-6 millones de dólares) por año.
Además de Chequia, otros seis países europeos –Alemania, Finlandia, Francia, Noruega y Países Bajos– también impusieron un embargo sobre los suministros militares a Turquía.
Turquía comenzó el 9 de octubre su operación Fuente de Paz en el noreste de Siria para alejar a las milicias kurdas de su frontera y establecer allí una zona segura para albergar a los miles de refugiados sirios que permanecen hoy en territorio turco.
La operación apunta contra las formaciones kurdas, entre ellas las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), las milicias del Partido de Unión Democrática (PYD) y las Unidades de Protección Popular (YPG) que controlan el noreste sirio y a las que Ankara vincula con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, proscrito en Turquía por considerarse terrorista).
Estados Unidos, el principal aliado de las milicias kurdas en Siria, rehusó apoyar la intervención de Turquía y retiró sus fuerzas de la zona de hostilidades.
Decenas de países condenaron también la ofensiva turca al tacharla de "agresión" que viola la soberanía e integridad territorial de Siria.
El domingo pasado se informó que el Gobierno de Siria, que no reconoce la autonomía kurda al este del río Éufrates, ni a su ala militar, las FDS, alcanzó un acuerdo con los kurdosirios para hacer frente a la ofensiva turca.
sputnik
