"Los británicos cometieron un acto de piratería y nosotros respondimos", dijo Lariyaní, citado por la agencia Mehr, en una sesión parlamentaria.

Lariyaní hizo este comentario después de que un diputado lamentara que la asamblea no hubiera emitido una declaración en apoyo al apresamiento del Stena Impero por el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica.

El 20 de julio, el jefe de la autoridad marítima y portuaria de la provincia de Hormozgán, sur de Irán, dijo que el petrolero Stena Impero, de 30.000 toneladas, había colisionado con un pesquero en su ruta y que, según la ley, es necesario investigar las causas del accidente. A raíz de la colisión, según él, los tripulantes del pesquero "se pusieron en contacto con el barco británico pero no recibieron ninguna respuesta", por lo que informaron a la organización marítima de Hormozgán, acorde a los procedimientos legales.

​El 19 de julio, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán informó haber apresado el petrolero británico Stena Impero en el estrecho de Ormuz por violación de las normas internacionales.

Junto con el Stena Impero fue detenido un buque de bandera liberiana, Mesdar, aunque este pudo continuar su travesía unas horas después.

A bordo del buque británico viajan 23 tripulantes, entre ellos tres ciudadanos rusos, así como nacionales de la India, Letonia y Filipinas.

El 4 de julio transcendió que el petrolero Grace 1 fue detenido en Gibraltar bajo sospecha de que transportaba crudo a la refinería de Banias, Siria, una entidad sujeta a las sanciones de la Unión Europea.

Más tarde se supo que el buque era operado por Irán cuyo gobierno, sin embargo, niega que se dirigiera a Siria.

La orden de detención del Grace 1 fue prolongada en dos ocasiones, la última vez hasta el 15 de agosto.

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