Ilhan indicó que ella y Tlaib planeaban visitar Israel y Cisjordania dentro "unas pocas semanas", pero el viaje podría ser anulado por el Gobierno israelí a causa del apoyo de las dos congresistas al movimiento de boicot dirigido por los palestinos.

Tanto Omar, una legisladora de Minnesota nacida en Somalia, como Tlaib, la primera mujer palestina y estadounidense que es elegida representante en el Congreso, han sido acusadas de albergar sentimientos antiisraelíes, en parte debido a su apoyo al movimiento de Boicot, la Desinversión y Sanciones (BDS) contra Israel a nivel económico, cultural y académico.

Omar presentó el 16 de julio una resolución copatrocinada por Tlaib, con el objetivo de rechazar las leyes que buscan reprimir los boicots a Israel. La resolución, que no menciona explícitamente a Israel o al BDS, afirma el derecho de los estadounidenses a participar en boicots como parte de la libertad de expresión amparada bajo la Primera Enmienda de la Constitución, citando movimientos de boicot contra la Alemania nazi, la URSS y el apartheid de Sudáfrica.

​Omar, Tlaib y otros partidarios del BDS dicen que al instar a las empresas, los artistas y las universidades a romper los lazos con Israel, están utilizando medios no violentos para oponerse a las políticas injustas contra los palestinos. Israel dice que el movimiento enmascara sus motivos para deslegitimar o destruir al Estado judío.

En 2017, Israel promulgó una leycontrovertida que prohibía la entrada a cualquier extranjero que "a sabiendas haga un llamado público para boicotear a Israel".

Desde entonces, los ministerios del Interior y Asuntos Estratégicos han usado la ley para negar visados a estudiantes, activistas y artistas a su llegada a Israel.

El Ministerio de Relaciones Exteriores puede recomendar que no se aplique la ley a los políticos visitantes o los funcionarios del gobierno por razones diplomáticas; sin embargo, debido a la naturaleza sensible y al momento de la visita de Omar y Tlaib, la decisión final la tomará Netanyahu.

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