La esposa de Netanyahu firmó el pacto, alcanzado el mes pasado, en el Tribunal de Distrito de Jerusalén, después de una mediación de seis meses y de haber devuelto 55.000 séqueles (15.000 dólares) al Estado, 10.000 de ellos en concepto de multa.
Sara Netanyahu evitará así que la imputen por fraude y abuso de confianza al haber pagado un almuerzo de lujo y cocineros de alto nivel para la residencia del primer ministro, que ya cuenta con un chef oficial.
La justicia condenará a la esposa del primer ministro por delitos menores tras haber reconocido que se aprovechó de un fallo de contabilidad.
Sara Netanyahu y el conserje de su residencia, Ezra Saidoff, fueron acusados de fraude y abuso de confianza por gastar 100.000 dólares.
Saidoff tendrá que pagar 10.000 séqueles (casi 3.000 dólares) y prestar un servicio comunitario.
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