"También vemos la posibilidad de una escalada (económica) entre EEUU y China como algo que podría ser muy peligroso para el comercio global. Seguimos de cerca esta situación", dijo Malmström.
Anteriormente, el presidente de EEUU, Donald Trump amenazó con imponer aranceles comerciales afectando las exportaciones chinas por hasta 150.000 millones de dólares al año.
China por su parte anunció medidas de respuesta simétricas.
El 17 de abril la portavoz de la Cancillería china, Hua Chunying, anunció que Pekín se esforzará y ganará la batalla comercial a Washington si este continúa tomando medidas insensatas.
Hua subrayó que China y EEUU son las mayores economías del mundo y tienen lazos estrechos, lo que requiere que los dos países cooperen sobre la base de respeto e igualdad y busquen una colaboración de beneficio mutuo.
La diplomática también se refirió a la decisión de las autoridades norteamericanas de prohibir a las empresas de EEUU vender equipamiento al fabricante chino de teléfonos ZTE, alegando que esta compañía supuestamente suministra de manera ilegal tecnologías de comunicaciones a Irán y Corea del Norte.
Este 18 de abril el portavoz del Comité Estatal para Reformas y Desarrollo de China, Yan Pengcheng, anunció que han preparado un plan de emergencia para responder al conflicto comercial con EEUU.
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