El personal de la misión rusa en el Reino Unido voló hacia Moscú desde el aeropuerto Stansted de Londres, capital británica. Su expulsión fue una de las medidas que tomó Londres contra Rusia por su supuesta implicación en el envenenando con un agente químico a un exespía ruso residente en Londres. Moscú niega cualquier relación con el caso y condena las acciones hostiles del Gobierno británico.
Rusia exige a Londres que permita acceso a las pruebas del supuesto ataque con agentes químicos, pero denuncia la completa falta de cooperación del Gobierno británico. Londres se limita a acusar a Moscú de organizar el atentado contra Serguéi Skripal y su hija cuando aún no se han hecho pruebas suficientes sobre el caso.
Las acusaciones de Londres y la expulsión de los diplomáticos rusos, han hecho que las relaciones bilaterales entre estos países se compliquen enormemente.
Como contramedida a las acciones de los británicos, Moscú también expulsó a 23 de los diplomáticos del Reino Unido y cerró el Consejo británico de Rusia, una organización internacional con actividades en el campo de la cultura y la educación.
HispanTV.es
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