"El terrorismo internacional es una amenaza global y por eso estamos articuladas todas las autoridades del mundo", dijo Martínez, según un registro de audio difundido a la prensa por la Fiscalía de Colombia.

Martínez agregó que la detención del sujeto, identificado como Raúl Gutiérrez Sánchez y quien recién había ingresado de manera ilegal a Colombia, sirvió para prevenir "una actividad terrorista", y señaló que la investigación fue posible gracias al trabajo conjunto con agentes de España y de Estados Unidos.

El 15 de marzo un juez de Bogotá acogió las evidencias entregadas por la Fiscalía en contra de Gutiérrez –entre ellas conversaciones telefónicas con ciudadanos en Argentina y España, al parecer miembros de una organización terrorista internacional– y le imputó los cargos de tentativa de acto terrorista y concierto para delinquir.

Gutiérrez fue capturado el 12 de marzo por la policía de Colombia en la ciudad de Pereira (centro-occidente) luego de que las interceptaciones telefónicas y chats permitieron determinar que planeaba un atentado terrorista en una exclusiva zona de restaurantes de Bogotá conocida como la Zona T, frecuentada por ciudadanos estadounidenses que trabajan en la Embajada de Estados Unidos en la capital de Colombia.

Luego de que terminó la audiencia Gutiérrez dijo ante los periodistas presentes en el lugar que no es un terrorista.

"No soy un terrorista, solo lucho contra el nuevo orden mundial", expresó, según el diario local El Espectador, luego de lo cual fue conducido a la cárcel Modelo, de Bogotá, donde permanece recluido.

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