El canal cita informes de la oficina del vice primer ministro de Afganistán Mohamad Mohaqiq, cuya vivienda se encuentra cerca del lugar de la explosión.
El balance inicial fue de dos muertos y seis heridos.
Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques perpetrados por el movimiento islamista Talibán, el grupo terrorista Estado Islámico (Daesh) –ambos proscritos en Rusia– y otras formaciones radicales.
En el primer semestre de 2017, la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (Unama por sus siglas en inglés) documentó 1.662 civiles muertos y 3.581 heridos por el conflicto interno en el país.
Un 40% del número de víctimas civiles fue causado por explosiones que llevaron a cabo las fuerzas antigubernamentales.
El ataque más mortífero de los últimos quince años fue perpetrado en mayo pasado y se saldó con 92 civiles muertos y unos 500 heridos, según Unama.
Reuters
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