"Como servidores públicos que son, están sometidos al mandato de la ley y no al mandato de una persona", afirmó Catalá en declaraciones a la prensa.

El director general de los Mossos d'Esquadra, Albert Batlle, presentó este 17 de julio su dimisión ante el nuevo consejero de Interior del Gobierno catalán, Joaquín Forn, que el pasado sábado se mostró convencido de que el cuerpo policial facilitará la cita con las urnas.
Catalá dijo estar "seguro" de que la policía catalana defenderá "el interés general y los derechos de los ciudadanos" porque los agentes "no pueden recibir órdenes contrarias al Derecho".

"No están al servicio de un Gobierno y menos de un Gobierno de radicales y de un Gobierno que quiere incumplir las normas", afirmó el ministro conservador.

Además, el titular de Justicia adelantó que el Gobierno de España tomará medidas para impedir la celebración de "un referéndum que ha sido declarado ya inconstitucional".
Catalá afirmó que el Gobierno central "actuará en consecuencia" aunque no quiso "anticipar medidas ni promover ninguna actuación que no sea más que proporcionada y adecuada a lo necesario en cada caso".

Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, lamentó este lunes la "gravísima deriva" del Ejecutivo catalán e insistió en que el referéndum del 1 de octubre "no se celebrará".

Sputnik

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