"Después del ataque suicida de Kampung Melayu fueron detenidas 41 personas", cita el diario digital Republika Onkine al inspector general Setyo Wasisto, del departamento policial de relaciones públicas.

Este número, añadió el inspector, incluye a 14 sospechosos de haber planificado el ataque.

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Cinco personas, según él, fueron liberadas a falta de pruebas.

Dos artefactos explosivos que estallaron con un intervalo de cinco minutos cerca de la terminal de autobuses Kampung Melayu en el este de la capital indonesia, en la noche del 24 de mayo, causaron la muerte de tres policías, además de los dos terroristas suicidas y dejaron 10 heridos: cinco agentes y cinco civiles.

Los policías vigilaban el área donde se estaba celebrando un desfile previo al ayuno del Ramadán.

Según la información preliminar, los terroristas habrían confeccionado sus bombas a partir de ollas de presión.

En los primeros días de la investigación, la policía admitió la posible conexión de los atacantes con Daesh (el autoproclamado Estado Islámico, organización terrorista prohibida en Rusia y otros países).

Sputnik

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