El mandatario turco, que había mantenido una reunión de casi tres horas con su anfitrión estadounidense, Donald Trump, anunció la disposición de fortalecer los lazos económicos con EEEU y se mostró confiado en que "también golpearán nuestra puerta en el asunto de Siria".
En un momento en que las milicias árabes y kurdas, apoyadas por la coalición internacional, continúan su avance hacia el baluarte yihadista en Al Raqa, Erdogan afirmó que Turquía no piensa renunciar a su protagonismo en la región.
"Vamos a ver qué pasará. Pero Turquía estará en el campo en la región, tanto en Irak como en Siria ", dijo.
El presidente turco también reafirmó el rechazo de Ankara a la implicación de las Unidades kurdas de Protección Popular (YPG), grupo que califica de terrorista, en la ofensiva hacia Al Raqa.
"Creemos que cooperar con un grupo terrorista por Al Raqa no es saludable", apuntó.
La participación de las unidades kurdas en la lucha contra el terrorismo es uno de los temas que Erdogan pretende plantear en la próxima cumbre de la OTAN en Bruselas, los días 24 y 25 de mayo, según él mismo dijo a periodistas.
Ante la posibilidad de que las fuerzas kurdas se hagan con el control de Al Raqa tras su liberación, como ocurrió ante en Manbij, Erdogan advirtió que Turquía no dejará que los grupos terroristas respiren dentro o fuera de sus fronteras. "No permitiremos una franja", dijo.
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