Según el comunicado del tribunal, el condenado tiene antecedentes penales y se le acusa de "quitar la vida ilegal y premeditadamente a dos personas con especial crueldad".

Los defensores de los derechos humanos precisaron que los cuerpos de un hombre y una mujer, hermanos del asesino, fueron encontraros el 5 de marzo de 2016 en su casa privada en Narovlia.

Se indica que el tribunal ordenó cobrar al condenado una indemnización por daños morales de 50.000 de rublos bielorrusos (26.300 dólares).

El servicio de prensa comunicó también que la sentencia no entró en vigor todavía y puede ser recurrida.

Bielorrusia es el único país de Europa que aún aplica la pena de muerte.
En 1996 se celebró en el país un referéndum nacional sobre la pena capital y un 80,5% de los consultados se pronunciaron por conservar ese castigo.

Se considera que la conservación de la pena de muerte es uno de los principales obstáculos que impide a Bielorrusia recuperar su estatus de país invitado especial a la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE).

Sputnik

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